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los comunistas, los testigos de Jehová, los homouales los judíos prominentes y los que se oponían a su régimen. EL TRABAJO OS DARÁ LIBERTAD Avisos especiales estampados “El que compra de judíos es traidor de su pueblo”. Aunque esos mismos judíos han luchado bravamente en la ª Guerra Mundial en las filas del ejército alemán han sido una parte de la vida alemana por más de mil años. Ellos ayudaron al desarrollo de la ciencia alemana, de la tecnología alemana y, sobre todo, de la medicina alemana. Los libros se quemaron. Algunas de las mejores canciones de Alemania fueron prohibidas. “El intelecto corrompe el carácter”, dijo Himmler a los alemanes. Goering dijo: “Cuando oigo la palabra cultura”, “agarro mi arma”. Ahora, la era del intelecto judío exagerado llegó hasta el final. Ahora la juventud alemana cantaba una nueva canción. “Cuando la sangre judía brota del puñal entonces, todo va doblemente bien. En toda Alemania los niños aprendían que los judíos de su medio eran los peores enemigos. Todo el poder del estado se concentró en esta tarea. Los libros escolares se publican llenos de groseros dibujos antijudíos. Fue lanzado un juego especial para niños, que se llamaba “Juden Raus”. Fuera, los judíos. Las instrucciones decían “Si logras expulsar a seis judíos, eres el ganador, sin duda “. Los niños jugaban, los adultos ponían en práctica. Boicots, palizas, alertas para no comprar mercadería de judíos. Castigos por tener novias o novios judíos en , a una competición entre ciudades y aldeas para expulsar a todos sus judíos y se autodeclaran “libres de judíos”. Sieg Heil! Sieg Heil! Sieg Heil! Sieg Heil! Sieg Heil! Sieg Heil! El éxito de esta campaña fue testigo por un motociclista holandés que andaba por Alemania y grabó con su cámara los interminables carteles y placas de la ciudad. NO QUEREMOS JUDÍOS AQUÍ. JUDÍOS, FIJEMOS POR SU CUENTA Y RIESGO Al de poco tiempo esas placas fueron retiradas en para que los turistas de las Olimpiadas que se celebraron en Berlín no se asustaran. Hitler esperaba que los juegos fueran el triunfo de su así llamada “raza superior aria”.